LA PROMESA DEL FENIX

ESTA TODO INMERSO EN UN ABISMO, PERO EXISTE PROMESA POR CUMPLIR, DESDE EL CIELO HASTA EL INFIERNO...

de emos, cuerpos y simbolos


De emos, cuerpos y símbolos.

¿Qué está atrás del enfrentamiento entre jóvenes emos y anti emos de la plaza de armas de Querétaro? ¿Que factores podemos identificar en estas disputas entre cuerpos y símbolos? ¿Porque se recurre a la fuerza bruta contra quienes muestran signos diferentes de identidad?

Alcanzo a plantear aquí algunas hipótesis espontaneas ante un tema muy complejo que tendrían que abordarse con urgencia. Me parece que se combinan factores económicos e ideológicos, que se trata de reacciones a la exclusión, a la falta de alternativas y a la desigualdad social entre los jóvenes de hoy. Es una lucha de clases del grupo de edad de mayor densidad demográfica: una oposición de masas donde de un lado están las elites, las niñas y niños bien, y del otro los excluidos; de un lado los racistas y moralistas, y del otro los rebeldes.

En este país la agudización de la pobreza ha llevado a que la mitad de los y las jóvenes que ya no pueden seguir estudiando después de los 16 años, que más de la mitad tenga que insertarse al mercado laboral antes de llegar a los 20 (empleos precarios y de baja calificación) y que 5 millones de ellos trabajen como inmigrantes indocumentados en Estados Unidos.

La falta de respuestas del estado a las necesidades juveniles convierte la heterodoxia y la actitud institucional en signos de realismo. Hoy la música y las expresiones estéticas ya no son solamente generadoras de identidad juvenil, sino que además están cobrando un sentido de resistencia pacifica y reducto para canalizar la frustración personal. Parece una alternativa a la movilización social cuando hay una gran desconfianza y descalificación a los partidos y lideres políticos.

Como heredera de una cultura juvenil universal que viene construyéndose desde los años 50, cuando el deseo de llevar una vida diferente a las de los mayores empezó a construirse a través de los signos estéticos, códigos de lenguaje e imágenes de identidad, la actitud de las nuevas generaciones y el consumo selectivo de la música, vestimenta y mercancías siguen siendo medios privilegiados para expresar la disputa generacional. La globalización y el libre mercado han contribuido sin duda a extender el intercambio cultural y a diversificar los modos de expresión, tanto de la disputa como de la solidaridad. Son códigos que permiten esa distinción entre un nosotros y un ellos que atraviesa comunidades emocionales internacionales y que desde antes del siglo XXI rebasó las fronteras de los Estados – Nación.

Pero el llamado a la violencia y a la intolerancia contra los emos de Querétaro tiene un nuevo ingrediente ideológico. Entre las convocatorias difundidas por internet se destacan: “ un emo es por definición un tipo raro con gustos sexuales mucho mas raros aun”; “adoran a los gays y todo emo ha besado a algún amigo, siempre usan ropa rosada, morada y demás colores emosexuales”; “tu eres de las personas que ya están hartas de andar por la calle y ver en cada esquina un emo, bueno pues creo que este aviso te interesa: el día jueves 7 de marzo a las 8:00 pm nos daremos cita en el Jardín Cenea para de allí ir todos juntos a romperles la madre a los emos de mierda que se sitúan en la plaza de armas. De verdad necesitamos ver unión, no puede ser que esos emos de mierda nos estén invadiendo. Esperamos contar con tu presencia, puedes llevar fileros bóxers. Si somos muchos les podremos dar en la madre a todos y así la guardia municipal de Querétaro no podrá hacer nada. Por un Querétaro sin emos, ojala y nos acompañes. Puedes llevar tu respectiva mona. No llevar armas de fuego. Graxias”.

El mensaje fue efectivo, pues llevó al linchamiento múltiple y dejo malheridos a varios de los llamados emos. Se trata de una movilización misógina con tintes de derecha fascista: se aprovechan los sentimientos de miedo y frustración para exacerbarlos mediante el odio a lo femenino y a lo gay, la homofobia, la discriminación sexual, y el moralismo y hasta el militarismo.

Ese linchamiento es un signo muy peligroso de la derechización de los jóvenes que viene subsidiándose en la última década desde el PAN, los empresarios, los jerarcas eclesiales. También resaltan las situaciones limite a que son expuestos los jóvenes frente al mundo tan hostil que están viviendo. La polarización alcanza niveles alarmantes. Menos mal que también crecen los movimientos de resistencia civil pacifica, como el de la defensa del petróleo, en la cual están participando muchos jóvenes y mujeres. Esta participación puede disipar la depresión y abrir alguna esperanza, y es que hay momentos en que parece que la población esta apunto de estallar.

Gabriela Rodriguez

La jornada. Viernes 28 de marzo de 2008